Ponte en camino hacia el Sur (Hechos 8,26-40)

Es hermosa la historia de Hechos que nos presentan hoy las lecturas. Es una historia de un testimonio, de un apostolado, de un encuentro casual… Y es que la vida está llena de encuentros casuales, encuentros que cambian la vida, encuentros que dan luz, encuentros que tejen lazos, encuentros del Espíritu…

El acierto de Felipe en su disposición y confianza en la llamada del Señor que le insta a ponerse en camino hacia el Sur. Él no sabe adónde va. Él no sabe a qué está llamado. Él no sabe qué le espera. Pero Dios enreda.

Yo he dicho que sí estoy dispuesto a ponerme en camino. Es más, me he puesto en camino hace mucho tiempo. Desde que decidí aceptar una propuesta para ir de monitor a las colonias de escolapios de Cercedilla, hasta que empecé a acompañar mis primeros grupos de catequesis, desde que abrí las puertas a la opción comunitaria, di el sí a mi esposa, aposté por tener hijos, me metí en el Ágora marianista… hasta el último enredo en el que estoy embarcado trabajando por, para y con las familias en el cole de escolapias de Carabanchel donde estudia mi hijo mayor.

Y puedo asegurar que sin saber muy bien cómo ni por dónde… en camino siempre hay encuentros casuales, siempre hay Reino que construir, siempre hay oportunidades de crecer…

Un abrazo fraterno

¿Cuál es tu obra? (Juan 6,30-35)

¿Cuál es tu obra? ¿Qué signo vemos en ti para creer? Eso le preguntó la gente a Jesús y hoy me ha llamado la atención y me ha interpelado porque esta pregunta, para un cristiano, siempre es vigente. Y yo hoy siento que me la preguntan a mi también: ¿Hay algo en mi que, al verlo, lleve a Dios, a Jesús? ¿Cuál es mi obra?

Sinceramente creo que hay cosas que no son muy buen ejemplo y además, sinceramente, lo más oscuro intento que no se vea demasiado. Escaso de radicalidad diría yo. Pero también creo que me esfuerzo en orientar mi vida teniendo a Dios en medio. Creo que intento apostar por la vida, por la fe en comunidad, por la valentía y la confianza del Señor, por el amor… a veces lo haré mejor y a veces lo haré peor. Hoy por hoy los demás mirarán mi familia, mi comunidad y mis diferentes compromisos por construir Reino y ayudar a que otros vivan más felices. Es lo que tengo. Pero no sé si convencerá demasiado…

Como dice el salmo, mientras tanto «yo confío en el Señor».

Un abrazo fraterno

Meditaré tus maravillas (Salmo 118)

Hay momentos en los que la vida se torna un auténtico regalo. Estoy dispuesto a afirmar que hay más momentos de esos de los que a veces somos capaces de percibir. Vivimos muy desconectados de lo bueno que nos sucede cada día y eso nos hace desgraciados, ansiosos, consumidores, pesimistas…

Llega una época de vivir cada detalle al 100%. No hay lugar para la desazón. Sí para el milagro y la maravilla. Yo quiero vivir así.

Un abrazo fraterno

Pensaban y sentían lo mismo (Hechos 4,32-37)

A veces cuando leía esto me daba la sensación de que esto de pensar y sentir lo mismo era intentar unificar e igualar aquello que, de por sí, es distinto y, en esa riqueza, rico y valioso. Y es verdad que la diversidad es buena, valiosa y digna de protección pero algo hay en estas palabras de Hechos que voy entendiendo poco a poco y que vivo día a día en mi vivencia comunitaria. Y es que pese a ser distintos y no tener todos el mismo camino hacia Dios y hacia la Verdad siento que mis hermanos de comunidad y yo cada vez pensamos y sentimos más de la misma manera porque nos vamos cultivando y confrontando juntos con la Palabra; porque vamos educando juntos el corazón; porque miramos juntos hacia los mismos horizontes; porque vamos entrelazando las vidas; porque todo es de todos y porque acaba creándose una unidad difícil ya de separar.

Es complicado explicarlo pero siento que la lectura de Hechos es un hermoso espejo donde ponerse delante para ver cómo estamos siendo testigos de la resurrección.

Un abrazo fraterno

El viento sopla donde quiere (Juan 3,1-8)

Tenemos que asumir que no controlamos demasiado de nuestras vidas. La sociedad en la que vivimos intenta una vez tras otra convencernos de que es así, de que nuestras seguridades, conocimientos, capacidades económicas… nos dan la certeza de controlar nuestras vidas pero, al final, no es tanto lo que está bajo el poder de nuestra decisión.

El viente sopla donde quiere y es mejor tener el espíritu curtido. Esa es la seguridad que yo quiero: estar listo para lo que venga, capaz de afrontar aquello que se me pida, consciente de asumir lo que considere oportuno.

Recuerdo con agrado la segunda peli de Narnia en la que sólo la pequeña es capaz de ver a Aslan, de intuir un camino en el precipicio. Sólo ella es capaz de verlo porque sólo ella quiere verlo, sólo ella sabe que sin él todas las luchas se tornan en complicadas. Con él todo es diferente. En su abrazo encuentro paz y soy capaz de muy altas cotas. Quiero nacer, en esta Pascua, de nuevo. Quiero seguir poniendo mi vida a su luz. Sé que es el mejor camino hacia la felicidad.

Un abrazo fraterno

No tengáis miedo (Mateo 28,8-15)

Uno de los signos de encuentro con el Resucitado es que el miedo desaparece y uno es capaz de afrontar la vida desde otros pilares y otras motivaciones sin la paralización del miedo y la seguridad insana. Y creo que en este punto si estoy siendo capaz de vivir mejor y de encontrarme de manera más verdadera con el Jesús que venció a la muerte e infunde vida aquellos que le siguen.

Claro que hay cosas, planteamientos, opciones, acciones, proyectos… que me dan cierto respeto pero voy entendiendo desde lo profundo que Jesús Resucitado está conmigo y que me infunde vida, ánimo, valor… para afrontar las cosas desde la búsqueda de la felicidad y la construcción del Reino.

Un abrazo fraterno

NOCHE DE VIGILIA PASCUAL: Verdaderamente ¡ha resucitado!

Celebrar la vigilia Pascual es el monasterio de Sant Jeroni de la Murtra ha sido un auténtico regalo. Me quedo con tres sensaciones: la olfativa, la auditiva y la visual. Por un lado, todo OLÍA  A FLORES. a flores de campo, silvestres, grandes y redondas, amarillas y blancas… Ummmm… Todo olía a primavera, a vida, a alegría… Por otro lado, EN EL GLORIA SONARON Y RESONARON LAS CAMPANAS DEL MONASTERIO. Yo esto no lo había vivido nunca y es tan… ¡genial! Ese momento en el que las luces se encienden, en el que Cristo resucita, el que se anuncia al mundo la Buena Noticia… Y por último, la sensación visual impresionante de la hoguera, de la oscuridad, de la luna llena, de la noche, de las velas, del cirio en cabeza, de la iglesia a oscuras, de la explosión de luz… ¡Qué rica esla liturgia en la Vigilia!

fue una noche especial que Esther y yo vivimos juntos y que nos llenó de gozo. una comunidad pequeña con un cura magnífico. Echamos de menos a muchos. Echamos en falta a la comunidad y, a la vez, la tuvimos tremendamente presente.

Una Vigilia distinta. Un regalo.

HOY, CRISTO, VERDADERAMENTE HA RESUCITADO

VIERNES SANTO: ¿Adorar una cruz?

Es realmente escandaloso para los no creyentes que los católicos adoremos una cruz el día de Viernes Santo. para mi es uno de los momentos con más sentido. El gesto lo llena todo. Es celebrar el amor de Jesús hasta el final, es celebrar que estamos salvados… y a la vez es asumir las consecuencias de vivir en la verdad, es hacer propias las consecuencias de amar, de querer ser Jesús en la tierra hoy…

Esther y yo celebramos de manera muy sobria este Viernes Santo junto a la comunidad de los carmelitas. Escuchamos la Pasión y luego besamos la cruz. Es mi cruz. Y quiero llevarla. No hay otro camno. No hay otra posibilidad. No hay otro sendero…

Un abrazo fraterno