Que todas las criaturas te den gracias, Señor (Salmo 114)
Hay vídeos que contagian alegría. Al menos a mi. Soy una persona entusiasta, alegre, optimista y vital. Me gustan las personas y el mundo que me rodea. Veo que hay mucho de mal y de injusto y no cierro los ojos a ello pero también descubro innumerables motivos de vivir dando gracias al Padre.
Para cambiar el mundo hace falta fuerza, dones, fe, y muchas cosas más… Los caballeros que luchamos del lado del Padre somos caballeros de luz, de esa luz que ilumina lo oscuro, que quema, que enciende, que destella…
Por eso el salmo de hoy me llega y lo quiero ilustrar con esta magnífica interpretación. Me encantan estos vídeos de un montón de gente desconocida bailando y divirtiéndose juntas pese a la vida que cada uno lleva. Somos capaces de unirnos, de sentir juntos, de salir a la calle, de sonreir a la vez, de contagiarnos y de hacer maravillas juntos. ¿Por qué no?
Yo me apunto.