Dios ha visitado a su pueblo (Lucas 7, 11-17)
Jesús devolvió la vida a aquel muerto. Y el pueblo reconoció el milagro y descubrió la mano de Dios en aquel hecho. ¿Y nosotros?
Creo que somos un pueblo y una sociedad descreída, una Iglesia descreída; incapaces muchas veces de afirmar, como aquéllos: «Dios nos ha visitado». ¿No hay milagros o es que no los vemos? ¿Tan ciegos estamos?
No hacen falta ejemplos grandilocuentes. Cada familia. Cada colegio. Cada comunidad. Cada persona. ¿No hay muertos que vuelven a la vida? ¿Ciegos que recuperan la vista? ¿No hay luz donde antes había sombra o comida donde había miedo al hambre?
Yo sí creo tener la vista bien graduada en este sentido y, gracias a Dios, vivo como milagro tantas cosas… siento que, efectivamente, Dios me visita más de los que algunos están dispuestos a creerse.
Un abrazo fraterno
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!