En tus manos están mis azares (Salmo 30)
Esta es de las Palabras que sintetizan mi fe: poner mi vida en manos de Dios, mi día a día, mis decisiones y mis preocupaciones. Y vivir así me da paz.
Vivimos en un mundo concreto, es verdad, y no podemos obviar ciertos aspectos a los que hay que adaptarse por pura supervivencia. Pero también es verdad que me siento llamado a vivir de otra manera y, si pienso en qué se manifiesta esto realmente, tal vez llegaría a la conclusión sencilla de que se manifiesta en HACER VIDA ESTA PALABRA.
Me siento llamado a jugarme la vida y a gastarla en aquello en lo que creo, en lo que me sustenta, en lo que me configura, en donde Jesús está en medio. Me siento llamado a poner mis dones al servicio sin reservas. Esto no está a la orden del día. Hay que medir riesgos, cubrirse las espaldas, invertir en valores seguros y hacerse un buen plan de pensiones… ¡A la mierda! como diría mi amigo Fernán Gómez… Yo quiero vivir al estilo del Salmo…
Un abrazo fraterno
Valiente! porque a mi a veces me entra el cague de vivir así, de las renuncias que supone vivir haciendo vivo el Evangelio, predicando el estilo de vida de Jesús..pero me doy cuenta de que cuando lo haces merece la pena, da sentido a todo lo que hacemos, el Espíritu actúa!
Gracias Santi! Besotes!