Encuentro de bloggers en el Vaticano
Se acaba la semana y tengo por delante algo inimaginable hace apenas 2 semanas. El domingo embarcaré en un vuelo de Alitalia que sale a las 6:00 de Barajas con llegada prevista a Roma- Fiumicino a las 08:25. Comienzan 3 días de los que es difícil hacer una previsión y que se irán construyendo hora a hora, minuto a minuto.
He sido convocado al “Palazzo Pío X” en la entrada de “Via dell’ospedale”; que es una transversal de la “Via della Conciliazione n.5”; el lunes 2 de mayo para participar en el primer encuentro organizado por la Iglesia con bloggers de todo el mundo con el objetivo de reflexionar juntos sobre posibilidades y estrategias a la hora de Evangelizar a través de las redes sociales que Internet pone a nuestra disposición. La sopresa fue mayúscula al enterarme y llevo dos semanas mentalizándome y preparándome. Llega el momento.
He ido contactando con algunos de los bloggers que vamos a compartir el encuentro, sobre todo con los hispanohablantes y en especial con los españoles. También estará junto a mi Dani Pajuelo, ¡ya nos conocemos!, así que no voy sin conocer a nadie, cosa que también da mucha más seguridad. Los que me conocéis sabéis que independientemente de lo que dé de sí el encuentro en cuanto a contenidos y consecuencias, para mi es una oportunidad privilegiada de conocer a personas muy interesantes, establecer contactos y abrir ventanas y puertas que uno no sabe adónde le pueden llevar.
El Espíritu sabrá si debe salir algo que valga la pena de este viaje a Roma. Yo, por lo de pronto, conozco a uno que en Roma encontró la manera de servir a Dios, ¿verdad Calasanz?. Vamos allá.
Utilizaré el blog durante estos días para ir contando todo lo que pasa en el encuentro e iros adjutando fotos e impresiones.
Un abrazo fraterno
Santi, que hayas sido convocado creo que de entrada ya significa que tu blog es un ejemplo de apostolado y evangelización; aunque no te conozca, te sigo, y sabes que esa es mi opinión. Enhorabuena y disfruta; disfruta de cada momento con la tranquilidad y la seguridad de lo bien hecho.