¿Qué es eso para tantos? (Juan 6,1-15)
¿¿Y yo? ¿Qué soy yo, pobre de mi, para tantos hambrientos del mundo? ¿Qué puedo yo con tanta necesidad? ¿Qué valgo yo, con mis miserias, mis defectos, mis enredos…? ¿Qué es esto para tantos?
Pero Jesús, sin dejarme terminar, me cogió entre sus manos y me repartió a los presentes. Y todos se saciaron…
Soy poco por mi mismo. Grande en las manos de Jesús. Con capacidad limitada para cambiar nada por mi mismo. Capaz de devolver vista a los ciegos, el oído a los sordos, el habla a los mudos… en las manos de Jesús. Con defectos y carencias pero TREMENDAMENTE AMADO por el Padre.
Me di y se obró el milagro.
Un abrazo fraterno
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!