… tampoco túnica de repuesto (Lc 9, 1-6)
Hace ya algunos meses (o algún año) que leí un libro, recomendado por un hermano de comunidad, que se llama «Saber escoger» de Carlos G. Vallés. Es sobre el arte del discernimiento, del buen discernimiento. Habla de las elecciones, de las encrucijadas, de los caminos elegidos… Una de las anécdotas o historias se me quedó grabada. Hablaba de romper puentes, de dinamitar toda posibilidad de «volver atrás» ante una elección tomada y asumida. Hoy el Evangelio me habla de eso. Me habla de ponerse en camino, de saberme enviado. Una vez el camino comienza mejor no llevar todo aquello que nos hace cubrirnos las espaldas, comprar seguros antiriesgos… porque todo eso nos hará vacilar, nos hará dudar, nos hará no hacer las cosas lo mejor que sepamos, nos hará perder la confianza en que «se nos dará por añadidura»…
Una túnica de repuesto es más peligrosa de lo que parece…
Un abrazo fraterno
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